Un Beso Que Le Atrapó A Mi Señor Perfecto Novela Completa
Capítulo 2236

Capítulo 2236

“Maira todavía está en la cama del hospital. Si no tienes algo urgente, ya me voy para allá.”

Leonardo fruncia el ceño con preocupación. Solo con pensar en Maira descansando silenciosamente en la cama del hospital lo hacia perder aún más la paciencia.

¿Y en estos momentos críticos, Rita venía a cuestionarlo por su impaciencia?

Del otro lado del teléfono, se escuchaba claramente el sonido de la joven respirando hondo por la nariz.

Leonardo se ablandó al pensar en algo, “No es que este impaciente contigo. Escucha, sé buena y obedece, y cuando tenga tiempo, iré a visitarte. ¿Vale? Maira está enferma y tengo que cuidarla, ¿entiendes?”

Conocía muy bien la facilidad con que Rita se echaba a llorar.

“Leito, ¿acaso ya te olvidaste de lo que le prometiste a mi hermana?

Antes de que ella muriera, le prometiste que cuidarias de mí, y ahora te has olvidado por una mujer que apenas conoces..

Al mencionar a la difunta, la expresión de Leonardo se volvió sombría y se quedó callado, eso era algo que en efecto habia prometido.

Si no hubiera sido por intentar salvarlo a él, la hermana de Rita no habría sufrido aquella crisis cardíaca tan joven, y Leonardo siempre se sentiría en deuda con la familia de Rita.

“No menciones intencionalmente a tu hermana. ¿Crees que podría olvidar lo que le prometi?”

La calma en la voz de Leonardo desanimaba a Rita…

Sabía que a Leonardo no le gustaba que le recordaran a su hermana, ¿cómo se atrevió a mencionarla

un momento tan delicado?

La aparición de Maira la habia descolocado, Rita respiró profundamente,

“Leito, ¡lo siento! No debi haber dicho eso, sé que no eres de esos, no olvidarias a mi hermana. Solo me sentia sola porque

no viniste a verme y regresaste al país, me duele en el alma. Ya casi es noviembre, ¿vendrás a acompañarme como de costumbre?”

Noviembre era el aniversario luctuoso de su hermana, y cada año, Leonardo volaba a Albaria una semana antes para acompañar a Rita en su recuerdo.

Recordando a aquella chica que había perdido la vida por él, Leonardo suspiraba en su interior.

“Iré, como siempre he hecho.”

¡Eso espero!” Del otro lado del teléfono, Rita pasaba de las lágrimas a la risa, aliviada, olvidando la competencia que representaba Maira.

Habian pasado años desde la muerte de su hermana y Leonardo no había descubierto nada…

La única persona que sabía la verdad se había ido para siempre.

¿De qué debía tener miedo?

Con paciencia, Leonardo terminaria siendo suyo.

Con ese pensamiento Rita esbozaba una sonrisa astuta.

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Capitulo 2236

Pero el Leonardo del otro lado del teléfono no sabia nada de esto, y cuando colgó el teléfono para levantarse, ya estaba exhausto.

En el hospital, apenas habia podido echar una cabezada de diez minutos al lado de Maira, pero al despertar se sentia lleno de energia.

Quizás siempre habia sido así con Maira, ella siempre le traía energia positiva.

Esa era la gran diferencia entre ella y Rita…

Al darse cuenta de lo que estaba pensando, Leonardo sacudía la cabeza con fuerza. ¿Por qué estaba comparando a Maira con Rita?

Ella era ella, Maira no era nadie más.

Durante ese tiempo, Maira simplemente cerró los ojos para dormir un poco y luego desperto.

Cuando Leonardo estaba a su lado, podia sentir su presencia y eso la relajaba por completo.

Pero cuando el aroma de Leonardo se desvanecia de la habitación, empezaba a inquietarse, incluso arrugaba el ceño sin darse cuenta, y su sueño ya no era tranquilo.

Cuando volvió a soñar una vez más que estaba siendo ahogada por las olas del mar, Maira gritó y abrió bruscamente los ojos…