Un Beso Que Le Atrapó A Mi Señor Perfecto Novela Completa
Capítulo 2235

Capítulo 2235

Leonardo se quedó sentado tranquilamente al lado de la cama de Maira, observándola mientras dormía durante media hora.

Antes de marcharse, fue a buscar al médico de cabecera y a la enfermera que acompañaba en la

habitación.

Estaban fuera de la sala, listos para atender cualquier necesidad del paciente.

“Sr. Leonardo, comenzó el médico.

Leonardo asintió al ser llamado: “Tengo que ir a casa un momento, aproximadamente…”

Echo un vistazo a su reloj, “volvere en menos de una hora. En este tiempo necesito que estén pendientes de cualquier cambio en el estado de Maira. Cuando despierte, diganle que volveré de inmediato.” Ambos asintieron en acuerdo, ya era parte de su responsabilidad.

Leonardo salió del hospital a toda prisa y condujo de regreso a la mansión de los Ibarra.

“Señor..

Leonardo hizo un gesto con la mano, indicándoles que no había necesidad de saludos formales.

Con una bolsa en mano, se dirigió directamente a su habitación para empacar algunas cosas para Maira. Viendo lo débil que estaba, sería mejor que se quedara en el hospital un par de días más para

observación.

No queria que nadie más empacara sus cosas por temor a olvidar algo importante, así que había vuelto especialmente a casa para asegurarse de que ella tuviera todo lo necesario para que se sintiera cómoda en el hospital.

Sin embargo, justo cuando estaba a punto de salir, recibió una llamada de Rita.

“¿Hola?” Contestó Leonardo.

Le preocupaba que Maira despertara y pensara que él la había dejado sola de nuevo.

Pero en lugar de eso, escuchó sollozos suaves del otro lado de la línea, “Leito…”

“¿Qué pasa? ¿Por qué lloras? ¿Hay algún problema?”, preguntó Leonardo impaciente.

Pero por más que preguntaba, Rita no respondia.

Leonardo miró la hora, todavia le quedaba tiempo antes de la hora acordada con los médicos y

enfermeras

Regreso al salón y se sentó

“¿Que sucede? Tengo asuntos que atender, si tienes un problema, dimelo de una vez Llorar no va a

solucionar nada”

Rita seguia secandose las lágrimas de manera desordenada y sonándose la nariz, sonando realmente

desdichada

“Leito, yo Olvidalo, no tiene sentido decirtelo, no tienes por que preocuparte por mi.

Leonardo perdió la paciencia. ¿Cómo que no debo preocuparme por ti? Si te ha pasado algo, debes decirmelo ahora para poder enviar a alguien que te ayude”

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Capitulo 2235

Nadie esperaba que después de esas palabras, ella lloraría aún más intensamente.

“Leito, realmente siento que es muy difícil soportar tanto, ¿cuándo acabará todo esto?”

Leonardo no sabia qué le había pasado a Rita en el extranjero, pero podía percibir el dolor en su voz.

Lamentablemente, Rita seguia sin decirle exactamente qué era lo que pasaba, solo lloraba.

Leonardo se irritó un poco: “¿Qué te pasa realmente?”

La mujer del otro lado frunció el ceño, ¿cuándo había sido Leonardo tan impaciente con ella? Luego, se puso a llorar de manera lastimera, “Leito, ¿estás enojado conmigo? Si te molesto, colgaré, no quiero obligar a mi amigo a escuchar mis quejas. Tienes tus cosas, ve y ocupate de ellas.”

Conociendo a Rita después de tantos años, Leonardo rápidamente detuvo a la persona que estaba a punto de colgar el teléfono, “Dime si hay algo que te molesta!”

Como se esperaba, la voz del otro lado no volvió a aparecer, pero tampoco colgó el teléfono, como si estuviera esperando que se disculpara.

“Lo siento, tengo muchas cosas aquí y tal vez me he apresurado un poco. ¡Vamos, cuéntame qué pasó!” Finalmente, Rita respondió: “Leito, sé qué tipo de persona eres, y es precisamente porque lo sé que entiendo lo que significa tu impaciencia hacia mi. Leito, ¿no lo has notado? Desde que conociste a esa Maira, te has vuelto cada vez más irritable. A veces me pregunto si realmente no quieres saber nada de

mi…

Ella había transmitido sus sentimientos y su culpa de la mejor manera posible, pero Leonardo simplemente no sabía qué decir en ese momento.

En su mente, solo había espacio para el deseo de cuidar a Maira; no tenía tiempo para pensar en otra

cosa.