¡Domestícame! Mi pequeña y gran Elia
Capítulo 1235

Capitulo 1235

Al escuchar como Orson llamaba el nombre de con de Priscila se sinti6 traspasado por una daga, lleno de dolor, wa, resentmento y cons

Su respiracion, que habia sido tensa, ahora se llenaba de una indignaciéon tempestuosa

De repente, se ho cuenta de que si dejaba pasar la oportunidad esta noche ya nunca tendria la posibilidad de casarse con él

habla caldo bajo el encanto de Jimena, y una vez que una mujer entraba al corazén de un hombre, era aun més dificil formar parte de su vida

Desde nifa, Priscila habia estado enamorada de Orson y habla luchado con todas sus fuerzas pare tener la oportunidad de unirse en matrimonio con Orson Salcedo

Pero Orson no la queria cerca, cada vez que la vela, buscaba como evitarla

El dolor en el alma de Priscila era inmenso, pero esto solo avivaba su determinacién Tomé una respiracién profunda y continuo desabotonando la camisa de Orson. El agarré su mano, intentando detenerla, pero ella apart6 la suya y siguié quitandole la ropa:

“Jimena, no it

Cuerpo

con fuego con la razén que le quedaba a Orson luchaba por resistirse, pero su

as, su voz era ronca y su pecho ardia

nombre de Jimena, y aunque su corazon dolfa, no se detuvo y le quité los

ve, dijo “Haz de cuenta que soy Jimena. Me trajiste a tu habitacién solo para dormir? Si no salgo mas, no estarian deshonrando tu propia persistencia?

son estaba aturdido, incapaz de abrir los ojos, pensando que estaba sofiando, con el cefio fruncido por la tension

Priscila se inclino hacia el y al acercar sus labios, sintio la respiracién caliente y agitada de Orson, atrayendola aun mas. Su cuerpo empez6 a moverse con ansias

Justo cuando estaba a punto de besario, el teléfono en la mesita de noche sono de repente El timbre era estridente y corto la accién de Priscila

Ella se detuvo y mir6 el teléfono con una mueca de desagrado, pensando en ignorarlo, pero el teléfono sequia sonando

Orson se movio ligeramente debido al ruido, y Priscila, asustada, se apresuro a levantarse y contest el teléfono con voz baja Hola? ;Qué sucede?”

Contenia su ira interna

;Por que tenian que llamar justo en ese momento, interrumpiendo su momento?

Desde el otro lado del teléfono, la recepcion del hotel respondié: Buenas noches, hay un problema con la identificacion que se registro aqui, su documento esta vencido y no puede ser utilizado. ;Podrfa venir a solucionario, por favor?

"Si pudieron registrar un documento vencido, por que ahora es un problema? ;Qué estaban haciendo antes?” Priscila respondio impaciente

La recepcionista se disculpo “Lo siento mucho fue una de nuestras empleadas nuevas quien lo registro y no conocia las reglas Pero ahora estamos siendo muy estrictos y la policia esta aqui revisando los

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documentos de los huéspedes. Si no viene a resolverlo, tendran que subir a la habitacion”

Al escuchar que la policia podria subir, Priscila se puso nerviosa y, reprimiendo su enojo, dijo: “Bajare enseguida.”

Si la policia subia y vefa lo que estaba pasando, todo su esfuerzo seria en vano.

Bajaria, presentaria su identificacion para volver a registrarse y luego podria continuar con lo que habfa empezado con Orson.

Tras sopesar rapidamente los pros y los contras, Priscila se arreglé la ropa, eché una Ultima mirada a Orson en la cama y sali6 de la habitacion, llevandose la tarjeta de acceso.

Priscila apenas habfa salido cuando Jimena, quien yacia en la otra cama, sintié un revuelo en el estdbmago y se levanté apresuradamente, corriendo al bafio donde vomité ruidosamente.

Se sentfa a punto de desmayar, con la cabeza dando vueltas.

Después de vomitar, tambaleante y confundida, regresé a la habitacién. No podia ver bien el camino con la luz tenue y se tropezo hasta llegar al borde de la cama de Orson, dejandose caer pesadamente

obre él. a

Mmm!” Orson, que estaba profundamente dormido, grufié por la presién y, con un rapido movimiento, e gir6 y terminé encima de Jimena.

Jimena, te di la oportunidad de rechazarme y no la aprovechaste. Ahora vas a ver si soy brusco o delicado”, dijo

Y con esas palabras, se inclin y beso apasionadamente los labios de Jimena.