¡Domestícame! Mi pequeña y gran Elia
Capítulo 685

Capitulo 685

Al verlo, el miedo de Elia desapareci6 al instante. No pudo contener las lagrimas que caian a raudales.

Asier se volvié y vio su rostro lleno de lagrimas de miedo. Extendié su largo brazo y la envolvié por la cintura, atrayendola hacia si con un abrazo que la hizo sentir protegida y segura. Su voz, en medio de aquel frio cielo oscuro y opresivo, sono excepcionalmente calida: “Todo esta bien ahora” Elia apoyo su frente en su pecho, aferrdandose a su ropa con las manos temblorosas. Su cuerpo temblaba incontrolablemente, y sus lagrimas empaparon su ropa. Lo que acababa de suceder fue aterrador, el trueno, el ataque de los monos salvajes, pensé que su vida terminaria alli

mismo

No esperaba que Asier viniera

Asier, que la abrazaba por la cintura, noté que su cuerpo temblaba. Su otra mano la acariciaba suavemente por la espalda, tratando de calmarla.

El sabia que ella tenia miedo de los truenos

Anteriormente, cuando trabajaba como conserje en el Grupo Griera, los truenos resonaban en la casa durante las tormentas y ella salté hacia él.

En ese momento, estaban en medio de la nada, con monos salvajes atacando y truenos retumbando. Su miedo debia ser atin mayor

Elia, con su cuerpo delgado, sinti6 el calor de su gran mano acariciando su espalda.g2

Sus grandes manos, curtidas por el trabajo, atin a través de la tela, tenfan la capacidad de encender chispas en su piel fria, proporcionando un calor reconfortante a su cuerpo Elia estaba realmente asustada, agarrando la ropa de Asier como si fuera su salvavidas, incapaz de calmarse por un momento. Se incliné contra él y se puso a llorar como una nifia pequena.

Durante los ultimos cinco afos, habia estado luchando sola, ganando dinero para mantener a su familia, siendo el fuerte respaldo para sus hijos. No importaba que dificultades o desafios encontrara, siempre los enfrentaba sola

Incluso cuando estaba cansada o herida, se escondia y se curaba sola

Porque era el apoyo para sus hijos y Rosalinda, si se debilitaba, solo haria que Rosalinda y los nifios se sintieran mas indefensos

Por lo tanto, durante esos cinco afos, incluso si la situacion era dificil, siempre se mostraba relajada y optimista frente a su familia

Todo el sufrimiento y la dificultad, ella lo procesaba en silencio.

Aquel dia, finalmente habfa un hombro en el que podia apoyarse y llorar.

En ese momento, no solo estaba asustada, tambien dejo salir todos sus resentimientos y cansancio, transforméandolos en lagrimas.

"Esta bien, estoy aqui, no pasa nada La voz grave de Asier reson6

La mano que la sostenia se volvid alin mas suave.

Justo cuando los dos estaban abrazados, los guardaespaldas rezagados y Bruno llegaron a la montana.

"Sr Griera, fuiste muy rapido, no pudimos seguirte.” Bruno, jadeando de cansancio, solo sabia que tenia que subir. Vio la silueta de Asier, pero no not6 a Elia en sus brazos. Dijo con dificultad

Al oir a alguien acercarse, Elia se sobresalto y se levanté de inmediato del regazo de Asier, tratando de mantener el equilibrio

Después del intenso miedo, su cuerpo se relajo debido a la tension y se sintié debil.

Sus piernas temblaron un poco y casi se cae de las escaleras.

Asier la atrapé con su largo brazo, sus cejas se fruncieron y dijo: Quieres morir?”

"Solo perdi el equilibrio por un momento, estoy bien, puedo mantenerme de pie.” Elia se apresuré a secarse las lagrimas, tratando de mantenerse de pie, pero solo una de sus piernas tenia fuerza Asier vio que su cuerpo se tambaleaba, mir6 hacia abajo en direccién a su pierna. Una de sus piernas estaba en el suelo, la otra colgaba en el aire Los jeans y los zapatos blancos de cuero dejaban su tobillo al descubierto, se veian muy hinchados.

Fruncié el cefio y la levanté en sus brazos.

Elia, alzada en el aire, se asusto y se agarro instintivamente a su cuello. Al ver a Bruno y a los guardaespaldas, se sinti6 un poco avergonzada “Solo necesito que alguien me ayude, puedo caminar por mi cuenta.”

“iQuédate quieta!” Asier orden con autoridad.