¡Domestícame! Mi pequeña y gran Elia
Capítulo 1351

Capitulo 1351

Asier no corri6 tras ella, simplemente observé como la delgada silueta de Elia se adentraba en la casa.

En la profundidad de sus oscuros ojos, se asentaba una profunda tristeza.

Como un mar inmenso y sin fondo, como un abismo cayendo hacia lo mas profundo.

Cuando Elia se volvia despiadada, realmente no dejaba margen alguno.

Todos decian que él era frio e insensible, pero frente a Elia, llevaba su corazon ardiente en las manos, solo para que ella lo enfriara con un balde de agua frfa.

Su corazén apasionado estaba lleno de heridas.

Para evitar verlo, ella incluso amenazaba con su propia vida

Ella realmente sabfa cémo apretar su punto débil, sabia lo que él valoraba.

El Asier de antes se aprovechaba de su espiritu indomable, como una cucaracha que no se podia aplastar, para controlarla y castigarla sin restricciones.g2

Porque sabia que, pase lo que pase, ella nunca desistirfa. Sin importar cuéntas adversidades enfrentara, al dia siguiente seguirfa siendo esa mujer optimista e inquebrantable que siempre fue, mirando siempre hacia arriba.

Pero ahora...

El no se atrevia a arriesgarse.

Elia habia perdido demasiado, su estado de 4nimo pendia de un hilo

Si la presionaba demasiado, quizas realmente no sobreviviria.

Preferfa que ella lo rechazara a que no estuviera viva.

Asier observo a Elia entrar en la casa, luego volvi6 a su coche y se a

alejo.

Los cuatro nifos estaban sentados alrededor de la mesa del desayuno, comiendo sin apetito, excepto Iria, los otros tres apenas tocaban la comida.

Habfan presenciado la pelea entre mama y papa, y parecfa algo grave.

Los pequefios estaban preocupados, temerosos de que la relacion de sus padres se rompiera y ya no pudieran verlos juntos ni compartir mas momentos calidos como esos.

Mientras pensaban como podrian ayudar a sus padres, Abel levant¢ la vista al ver entrar a Elia y dejo su tenedor para correr hacia ella

“Mam4, volviste!” Se par al lado de Elia, mirdndola con su pequefa cabeza alzada, y luego mir6 a su alrededor esperando ver a su padre.

La ausencia de Asier lo llené de una sutil tristeza.

“iMama!” Los otros tres pequefios también se acercaron.

Miraron detrés de ella con ojos inocentes, y al no ver a Asier, Iria fruncié el cefio y le pregunt6 con curiosidad: “Mamé, ;por qué papa no volvié contigo?”

"El tenfa que hacer algo, volvera cuando los extrafie.” Elia les explicé con ternura a los nifios 12:46

Capitulo 1351

“;Qué tal si vivimos en el Pueblo Saurl y no volvemos a la Capital?” Elia les propuso a los nifios. Ese lugar de conflicto albergaba demasiados recuerdos dolorosos y humillantes.

Ya no queria volver a esa ciudad.

“Mam, donde tu estés, estaremos nosotros.” Abel, comprensivo, tom¢ la iniciativa.

“Pero, ;papé vendra a vivir con nosotros?” Iria anhelaba estar con su padre.

“Tu papa esta muy ocupado, y un lugar rural como este no es para él." Elia le explicé pacientemente a

Iria.

Iria entendié que su padre no vivirfa con ellos.

Sub

pequefia cabeza se inclind desilusionada, pero no dijo nada mas.

“De ahora en adelante, los cuatro, mas mama y Josefina, estaremos juntos, como antes.” Joel concluyé. Aunque él también deseaba estar con su padre, si a mama no le gustaba, no insistirfa, siempre estarfa del lado de mama.

Elia, escuchando las infantiles palabras de sus hijos, sintié como sus ojos, apenas calmados, empezaban a arder de nuevo.

Si, como antes, pero faltaba uno, asi que todo habfa cambiado.