¡Domestícame! Mi pequeña y gran Elia
Capítulo 1243

Capitulo 1243

Jimena estaba confundida y se sentia incomoda “Daniel, bdjame, puedo caminar sola

“No llevas zapatos, y si te lastimas el pie con una piedra, va a doler mucho. No te preocupes solo son unos pasos hasta la calle, de ahi tomamos un taxi pata volver, le explicé Daniel la razén por la que la iba a llevar a cuestas

Jimena alzé la vista hacia adelante, el tramo del parque hasta la orilla de la calle era realmente corto. incluso si Daniel la cargaba, no tendrian que caminar mucho.

Entonces, dejo de resistirse y se dejo llevarla obedientemente,

Al llegar a la calle, mientras esperaban el taxi, Jimena le pidié que la bajara, que podia pararse en el suelo a esperar

Pero Daniel dijo: “Mejor te sigo cargando, ya te limplé la herida del ple, si te paras en el suelo podrian pegarse bacterias de nuevo.”

Jimena: “..." Esa excusa le parecié un poco forzada, pero no encontré la manera de refutaria.

Qué podia hacer ella siendo una mujer poco preocupada por la limpieza y él un hombre tan pulcro y educado?

Después de un rato, llegé el taxi y Daniel ayudé a Jimena a subirse al vehiculo antes de sentarse él también.g2

Jimena inicialmente no queria que la acompaiiara, pero recordando que él habia llamado a su jefe para pedir permiso, le hizo imposible rechazar su compafifa.

Pronto llegaron al complejo residencial de Jimena.

Daniel sali6 primero del taxi, y Jimena se bajé del otro lado. Justo cuando estaba a punto de bajar, Daniel ya estaba alli, agachado en una posicién perfecta para cargarla de nuevo.

Sin decir una palabra, la levanté y empezé a caminar.

Jimena podia sentir el calor de su espalda y se sentia incbmoda diciendo: “Ya estamos en casa, de verdad puedo caminar yo sala.”

“No llevas zapatos, es en caso de que..."

"Esta bien, esté bien, ya entendi. Jimena lo interrumpié antes de que pudiera terminar, sabia qué excusa iba a usar para llevarla en brazos.

Era el mismo argumento de siempre: no llevaba zapatos, se habia limpiado la herida y no debfa ensuciarse con las bacterias del suelo.

Era un poco excesivo su amor por la limpieza.

Si ella decfa que no habfa problema, que no le temia a las bacterias, quedarfa como alguien descuidada y poco higiénica.

Una mujer que parecia menos preocupada por la limpleza que un hombre, eso si que perjudicaria su imagen.

Al ver que no se oponia y que simplemente se dejaba llevar, una sonrisa de satisfaccién aparecié en el rostro guapo de Daniel.

Daniel sabia donde vivia Jimena, asf que la llevé hasta la puerta de su casa y tocé el timbre.

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Capitulo 1243

La puerta se abri6 rapidamente y la madre de Jimena al ver que, quiénes estaban en la entrada era un hombre cargando a una mujer, se sorprendi6é por un momento. Pero cuando reconocié a Daniel cargando a Jimena, su sorpresa se transformé inmediatamente en alegria y rapidamente se hizo a un lado para dejarlos pasar, diciendo con entusiasmo: “iDaniel y Jimena han vuelto, pasen, pasen...!"

Daniel no se hizo de rogar y entré cargando a Jimena hasta el sof4, donde la acomodé con cuidado.

Al verlos tan cercanos, Jacinta no podia dejar de sonreir: “Jimena, Daniel, ;pasaron la noche juntos? ;Han desayunado? Ay, mira que tonta yo preguntando si han comido, ya mismo voy a preparar algo.”