Un Beso Que Le Atrapó A Mi Señor Perfecto Novela Completa
Capítulo 1826

Capítulo 1826

A Esther le picaba la piel por el roce de él. “¿Qué haces?!”

Adrián se levantó, apoyando su frente en la de ella. “¿Qué estás diciendo?”

Su voz traía consigo un aliento caliente que se esparcia por su rostro, sus narices casi se tocaban y parecia que estaba a punto de besarla.

Rápida de reflejos, Esther interpuso un dedo entre ellos, frunciendo el ceño en señal de advertencia. ¡Ya

basta!”

Adrián, al no conseguir lo que quería, parecía desilusionado. “Por qué?”

Ella lo miró fijamente. “¿De verdad crees que este es el momento para eso? ¡Sueltame! ¡Tengo que preguntarte algo

El parecia reacio a soltarla. “No voy a huir, podemos hablar de eso más tarde, ¿vale?”

Esther casi cae en su trampa, asi que se esforzó para mantener la razón. ¡No! Yo tampoco voy a huir, puedes seguir intentando más tarde…”

No pudo terminar la frase y se puso roja.

Al verla asi, él se rio y le acarició la mejilla con dulzura. “¿Qué quieres decir con más tarde‘?”

Avergonzada, hizo un gran esfuerzo para empujar a ese grandullón. “¡Nada! ¡Por favor, sé serio!”

Finalmente, Adrián accedió a dejarla, pero solo en cuanto a no continuar lo que estaba haciendo, no la soltó

del todo.

La levantó en brazos, se sentó en la silla de su oficina y la colocó en su regazo, abrazándola como si fuera un tesoro preciado “Bien! Entonces podemos seguir con esto más tarde, puedes hacer tus preguntas, jadelante!” Sentada en su regazo, estaba más confundida que nunca, no sabia por dónde empezar.

“¡Libérame! Asi, ¿cómo voy a preguntarte algo?”

El hombre parecia indiferente, se inclinó y volvió a acercar su rostro al de ella. “¿Por qué no puedes preguntar? No te estoy tapando la boca. ¿0 estás tan cerca de mi que no puedes pensar claramente? ¿Estás distraida?

Esther frunció el ceño y empujó su rostro perfectamente guapo con disgusto. “No lo estoy! ¡Voy a preguntarte algo! ¡Escucha! Primera pregunta, ¿Sofia sabe que te has ido?”

Al escuchar ese nombre, un destello de desagrado cruzó los ojos de Adrián. “No lo sabía ayer, pero probablemente lo sabe ahora.”

Ella lo miró fijamente. ¿Y qué piensas hacer ahora?”

Sofia acababa de despertarse en el Hotel Después de arruinar la boda de Josefina la noche anterior, se habia ido a beber

Normalmente, cuando Romi estaba cerca, rara vez bebia. A él no le gustaba que bebiera, cada vez que lo hacia, no le hablaba y la evitaba.

No quería que Romi la odiara, asi que rara vez lo hacía.

Después de poner a su hombre en el avión hacia Albaria, se sintió mucho más aliviada. Al menos por un tiempo, no tendría que preocuparse de que Esther se metiera con él.

La casa en Albaria estaba bien protegida, incluso si Esther lograba encontrar el lugar, no podría entrar a su patio y mucho menos llevarse a Romi

Debería estar feliz, relajada y sentirse como una ganadora. Pero por alguna razón, sentía una opresión en el pecho, una sensación de malestar.

Se había ido a un bar y había bebido mucho.

Antes, era una persona muy sociable, tenía muchos amigos y a menudo se reunían para comer, beber y celebrar toda la noche.

Pero desde que decidió mantener a Romi a su lado, se habia vuelto muy cautelosa, no se atrevía a salir con sus amigos por mucho tiempo, temiendo que al volver a casa, él hubiera desaparecido.

Poco a poco, habia reducido el contacto con sus antiguos amigos.