Un Beso Que Le Atrapó A Mi Señor Perfecto Novela Completa -
Capítulo 1813
Capítulo 1813
Al terminar, la pequeña saltó y salió, tirando de la mano de su mamá.
En la habitación solo quedaron Esther y Leticia, mirándose una a la otra.
La que habló primero fue Leticia, sonriendo suavemente, “Luna, no me recuerdas, ¿verdad?”
Esther se quedó mirando a su madre, sin decir nada.
Leticia suspiro con culpa, “Fui yo quien te fallo, te dejé a la deriva durante muchos años, ahora que te encontré, no puedo decirte cuanto lo
siento.”
Esther miró las lágrimas calientes de su madre caer y bajando los ojos rojos preguntó: “¿Cómo te heriste? ¿Es grave?”
La mujer se quedó quieta un momento, miró su herida y negó con la cabeza, “Está bien, no es nada serio”
Esther levantó los ojos y la miró, sintiéndose confundida y amarga, ya no era una niña y no podia tirarse en los brazos de su madre sin ninguna
restricción
“El dia antes de ayer, cuando la señora Berta me llamó para verte, ¿por qué desapareciste? ¿Estabas escondiendote de mi?” La voz de Esther temblo ligeramente.
Leticia negó rápidamente con la cabeza, “No, no es eso! Luna, jamás te evitaria! Senti que no podia enfrentarte porque no había hecho lo que una madre debería hacer”
Los ojos de Esther se enrojecieron aún más, ¿Por qué me dejaste sola y te fuiste? ¿Por qué nunca volviste a buscarme? Yo siempre, siempre te estuve esperando”
Las lágrimas de Leticia no dejaban de caer, “No lo hice a propósito. En aquel entonces, alguien estaba intentando matarme, pensé que era demasiado peligroso tenerte cerca, así que te dejé temporalmente con Juan para evitar el peligro. Después, fui a buscarte! ¡Realmente fui a buscarte! Pero Juan me dijo, me dijo que hablas muerto. Me dio una urna con cenizas y pensé, pensé que ya no estabas.
Esther lo sabia, sabia que su madre no la había abandonado, sabia que su mamá nunca la abandonaria!
Durante todos esos años, nunca creyó que había sido abandonada, por lo que nunca dejó de buscar a su madre.
Hoy por fin, por fin vio a su madre.
Habiendo obtenido la respuesta, apretó la mano de su madre de manera incómoda, “¿Quién intentaba matarte?”
Frente a esa pregunta, el rostro de Leticia volvió a ponerse pálido, parecia muy evasiva.
Pero Esther tenia una idea, “Fueron las personas de la familia Ibarra, verdad? ¿Querian matarte?”
Los ojos de Leticia estaban llenos de venas rojas y tartamudeó: “Luna, en realidad, las personas de la familia Ibarra deberian estar apuntandome no a ti, no te preocupes”
Esther apreto la mano de su madre, “Importa si las personas de la familia Ibarra están apuntándote a ti o a mi? Fueron ellos quienes nos hicieron separarnos!”
Leticia respiro hondo. “No quiero juzgar a los demás, pero tu hermano, no deberia estar con ellos, él te quiere mucho.”
Esther resoplo friamente, “Para mi, no hay diferencia”
Leticia no queria transferir sus resentimientos a su hija, “Luna, tu hermano también era un niño en aquel entonces, sus habilidades eran limitadas, no podemos culparlo
Esther miró a su madre. No quieres que busque a la familia Ibarra para arreglar cuentas?”
Leticia sonrio amargamente. “¿Qué cuentas? Han pasado muchos años y no quiero mencionar esas cosas. Volví a casa esta vez porque Berta me dijo que había visto a alguien que se parecía mucho a mi hija. Ahora que te encontré, me iré de nuevo, dejemos que el pasado sea pasado.”
Esther frunció el ceño, “Irte? ¿Vas a dejarme de nuevo?”
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