Un Beso Que Le Atrapó A Mi Señor Perfecto Novela Completa
Capítulo 1517

Capítulo 1517

Si solo se lo hubiera contado a Jimena, todo estaria bien. Ella podría haberlo discutido, pero si le decía a Verónica y Josefina, estas dos jovencitas impacientes, solo causania más complicaciones innecesarias

Ahora si Marisol y Florencio se enteraran de la situación, tampoco podrian quedarse quietos.

“No ha pasado nada, solo que la empresa me ha mantenido muy ocupada últimamente, estoy un poco cansada“, respondió casualmente.

Josefina frunció el ceño y cruzó los brazos, Tia, si te sientes cansada, deberías dejar de ir a la empresa! Eres una chica joven con tres hijos, ¿por qué tienes que asumir tanta presión?”

Esther tomó un sorbo de su té, “Acabo de asumir el control y todavía no me acostumbro. Todo estará bien después de este ajetreado periodo.”

Josefina se sentia mal por su tia, y estaba resentida por ella. En este momento, Verónica le dio un codazo a Josefina para recordarle que se entrara en el punto.

Josefina finalmente volvió al tema, “Ejem, tia, tengo un amigo que es un gran psicólogo, si tienes tiempo el fin de semana, ¿quizás podrias ir conmigo a su consultono para charlar un rato?”

¿Había dicho un psicólogo?

Esther levantó una ceja, ¿Por qué de repente quieres presentarme a un psicólogo?”

Josefina sonrió, “Es porque mi amigo es muy guapo y amable Cuando me siento mal, voy a hablar con él y me hace sentir mucho mejor al instante.”

Esther no creia que necesitara un psicólogo, pero pensó en su hijo Gaspar…

Gaspar habia estado actuando extraño desde el dia en que lo regañó por correr salvajemente por el parque. Tal vez necesitaba la intervención de un psicólogo.

Con este pensamiento, Esther asintió, “Está bien, este fin de semana, si tengo tiempo, iré contigo a conocer a tu amigo, para ver si es tan guapo como dices”

“Genial! Entonces, hagamos planes para ir juntas este fin de semana Josefina sonrio satisfecha y le guiñó un ojo a Verónica. Su objetivo se habia cumplido

Mientras Josefina y Esther conversaban en la sala, la taza de té en la mano de Esther quedó vacía. Dejó la taza y le dijo a Jimena, quien estaba sosteniendo a Helena

“Jimena, deja a Helena con Verónica por un momento y ven conmigo. Necesito hablar contigo”

Jimena asintió y después de dejar a Helena para que jugara con su tia, siguió a Esther al piso de arriba.

Una vez en la habitación de Esther, Jimena cerró la puerta y preguntó “Jefa, necesitas algo de mi?”

Esther no respondió de inmediato. En su lugar, camino lentamente hasta la ventana de su habitación y miró al cielo nocturno…

“Jimena, tú, Sergio y yo nos conocemos desde niños. Hemos pasado por mucho juntos y confiamos el uno en el otro más que en nadie, ¿verdad?”

Jimena asintió con firmeza, “Asi eAsiEEEESDs

Esther sonrio levemente, “Pero ustedes dos se unieron a otros para engañarme.”

Jimena se quedó perpleja. “Jefa…”

Esther continuó “Hace años, di a luz a tres niños. Pero, todos ustedes me dijeron que eran gemelos. Y durante estos tres años, fui la única que no sabia que habia perdido a uno de mis hijos.”

Jimena bajo la cabeza avergonzada, “Lo siento, jefa. Cuando el Sr. Gómez desapareció, ya estabas muy afectada por ello. Nosotros pensamos que, si te deciamos que habias perdido a uno de tus hijos, seria aún más dificil para ti.”