Capítulo 2196

Finalmente. Maira aprovechó que Leonardo no habia regresado y se fue de la habitación.

Neo había dejado un lio considerable alli.

Maira se sentia completamente apenada. Pero con todo lo que había pasado, y su relación con Neo siendo el centro de atención en los titulares, las cosas se habian complicado aún más…

Tenía que volver a casa y explicarles todo a Brenda y Gustavo.

Ahora estaba comprometida por medio de un contrato con Leonardo, y tenía la obligación de evitar que los dos ancianos se preocuparan por los problemas entre ellos.

Con estas pensamientos en mente, Maira no pudo encontrar a Neo, así que se limitó a enviarle un mensaje de disculpa.

“Lo siento mucho, Neo. ¿Cómo estás? ¿Te lastimaste mucho?”

Mientras Maira se apresuraba a volver a casa, pidió a un asistente del set que revisara cómo se encontraba Neo.

Neo parecía estar bien e incluso le envió una foto suya.

“No te preocupes, solo dolió un poco en ese momento. El señor Ibarra supo controlar su fuerza.”

Al escuchar que no era tan grave, Maira finalmente se sintió aliviada.

Pero su sentimiento de disculpa no disminuía, “Lo siento mucho. Realmente lamento haberte involucrado en este conflicto.

Ya se lo expliqué, y creo que no volverá a aparecer en nuestro set de filmación. Espero que puedas perdonar su impulso esta vez.”

Neo no se esperaba que Maira pudiera convencer a Leonardo de no ir a su set de filmación.

Parecía que ella tenía más influencia sobre Leonardo de lo que imaginaban.

“No hay problema, creo que el señor Ibarra se puso celoso al ver las noticias en internet y malinterpretó nuestra relación. pensando que quizás había algo más entre nosotros.

Si se lo explicas bien, estoy seguro de que él lo entenderá.”

Maira sonrió amargamente al otro lado de la pantalla. ¿Leonardo entenderla? ¡Imposible! Maira le recomendó a Neo que descansara y que aprovechara para pedir un permiso al director.

Los rumores en internet se estaban calentando cada vez más…

Acababa de separarse de Leonardo en malos términos y ni siquiera sabía dónde estaba, así que ella, sola, tuvo que explicar todo a los ancianos al regresar a casa.

Cuando llegó a casa, Brenda estaba en la cocina y Gustavo sentado en el sofá con un libro en las manos, su pasatiempo favorito era la lectura.

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El anciano se sorprendió al ver a Maira regresar de repente, “Mairita, ¿por qué volviste a esta hora? ¿Ya terminaste la grabación de la tarde?”

Brenda, al escuchar el revuelo de Maira, también salió de la cocina.

A su edad, su actividad favorita era cocinar personalmente para su nieto y Maira.

Verlos comer con gusto lo que preparaba le llenaba de felicidad.

Brenda se quitó el delantal y se lo entregó a una empleada que estaba cerca.

“Mairita, has vuelto, ¿quieres tomar un vaso de agua fresca recién hecha? Le puse algunos cubitos de hielo para que esté bien fresquito, es el momento adecuado para disfrutarlo.”

Maira aún sostenía su bolso, sin saber cómo responder a la pregunta sobre su regreso inesperado.

Con una mirada, Brenda indicó a una empleada que se acercara y le tomara el bolso de las manos.

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17.09

Capitulo 2196

“Mairita, hay algo que quieras decirnos? Puedes contarlo mientras disfrutamos del agua fresca.

Maira era de esas personas que no podían esconder sus preocupaciones, y su expresión era claramente la de alguien

que estaba pasando por un mal momento. ¿Qué le habla pasado a Leo esta vez, si se suponía que iba a recogerla y ahora no aparecía?

“Bueno…“. Maira asintió obedientemente.

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