¡Domestícame! Mi pequeña y gran Elia
Capítulo 885

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Capitulo 885

Capitulo 885

Al ver que los nifios se tranquilizaban, Asier abrié la puerta del coche y se subio, ordenando a Bruno. "Vamos a Villa Serenidad.”

Bruno puso el coche en marcha y se alejo

Elia ech una mirada inconsciente hacia atrés y vio que la furgoneta sequia detras.

Volvié en si y se encontré con la mirada fria de Asier, que la asust6 hasta dejarla sin aliento.

Asier estaba sentado a su lado, su enorme figura proyectaba una sombra grande que la cubrfa, sus 0jos eran tan penetrantes que parecfan poder

atravesarla

“No tienes nada que decir?”, pregunté con su voz baja y fria.

El espacio reducido del coche y la temperatura circundante cay abruptamente, y se torno fria hasta la médula

Elia sintio la presion, parpadeo y dijo: “El vino de repente a jugar con los nifios, yo también fui tomada por sorpresa...

Termino de hablar, y nerviosamente mir¢ a los ojos frios de Asier g2

Ramiro le habia dicho que el miércoles a las ocho de la noche, vaya a Sabor Buendia, y evidentemente no podfa decirle eso a Asier

De lo contrario, Asier definitivamente no la dejaria ir

Queria saber qué tenia Ramiro que decirle sobre Sergio.

Asier la miraba fijamente con ojos profundos, su mirada penetrante y fria la mantenia bajo su control, como una espada afilada, apuntandola directamente a las profundidades de su alma.

Elia, presionada por su mirada aguda, sinti6 una capa tras capa de sudor frio corriendo por su espalda.

Justo cuando estaba a punto de ceder bajo la presion, la voz fria y tranquila de Asier soné. “Respeta tu papel! jDales un buen ejemplo a los nifios!”

"Sé que soy madre de cuatro hijos, puedes estar seguro de que no haré nada fuera de lugar”, respondié Elia a Asier, su tono era cauteloso y

consciente de si misma.

En ese momento, por supuesto, no provocaria a Asier. Finalmente pudo ver a sus hijos, y queria pasar un buen rato con ellos

Habia pensado mucho esos dias, incluso si tenia que dejar a Asier, tenia que llevarse a los nifios. De lo contrario, seria una perdida para ella. Ella dio a luz a cuatro hijos y los crio hasta que crecieron, ;y los iba a entregar a Asier, asi sin mas?

No podia permitirlo, los cuatro pequefos eran suyos, queria estar con ellos mientras crecian y participar en todos los procesos de su crecimiento No podia soportar que sus hijos la olvidaran, o que se distanciaran de ella.

Rosalinda tenia razon, mientras Asier todavia estaba interesado en ella, debia seguirle el juego, esperar a que bajara la guardia, y luego buscar una oportunidad para llevarse a los nifios

Asier escucho sus palabras cuidadosamente, y con el rostro serio dijo. “Recuerda lo que acabas de decir!”

Le echo una mirada y luego miro hacia adelante, su cuerpo se sentfa frio como el hielo.

Elia bajo la vista, no volvié a hablar y sus manos a los lados se apretaron ligeramente.

Despues de salir de la fiesta Betiana sintié una profunda insatisfaccion y caminé con enojo, avanzando rapidamente. Su pecho se agitaba constantemente, y las luces de neon pasaban por su rostro afligido, distorsionandolo de manera que parecia torcido, feroz, amenazante y

loroso

Rayan se apresuro a seguirla, gritando “Betiana espera”

At our a alguien llamarla. Betiana se detuvo bruscamente y giro la cabeza para ver a un hombre acercandose rapidamente a

Ese hombre

Rayan el hijo de una familia rica que tenia una tienda de antiguedades!

Ella respondi6 con enogo Qué quieres? tambien vienes a reirte de mu?”

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