¡Domestícame! Mi pequeña y gran Elia
Capítulo 660

Capitulo 660

Los ojos oscuros de Asier se quedaron aténitos por un momento, luego una risita se escapé de sus labios: “Estoy hablando de los nifios, ¢tl eres una nifia?”

Las pestafas de Elia temblaron, tragé saliva nerviosa y dijo: “No soy una nifia, pero soy una mujer...”

“¢Mi mujer, no puedo tocarla?” Asier levanto su barbilla con el dedo indice, obligdndola a mirarlo a los ojos con terror: “Sé inteligente, o te haré pasar todo el dia en cama manana.”

El corazon de Elia salté violentamente, casi muerta de miedo por sus palabras. Asinti¢ réapidamente: “Lo entiendo, no volveré a casa, descansaré aqui.”

Asier finalmente se mostré satisfecho, se levanté y se dirigié al bao.

Pronto, se escuchd el sonido del agua en el bao. Elia mir inconscientemente hacia el bafio. Detras del vidrio esmerilado, una figura alta se movia. A pesar del vidrio, se podia ver su piel bronceada y musculosa.

Al ver esto, Elia se quedo sin aliento y rdpidamente apart¢ la vista.

Se acosté en la cama, tratando de no prestarle atencién al bafio ni al sonido del agua

Porque solo escuchar el sonido del agua puede ser bastante sugerente.g2

Esa imagen, realmente no la podia pensar

Después de un tiempo, la puerta del bafio se abrié. Asier sali6, se meti6 en la cama y su pecho caliente se pego a su espalda.

El cuerpo de Elia se tenso, no se atrevia a moverse.

El pecho del hombre estaba tonificado, acababa de bafarse y atin brotaba de su cuerpo vapor de agua. Combinado con su poderosa fuerza, parecia querer penetrar los poros de Elia, llenando su sangre con su aroma

Elia se quedd quieta, pensando que asi podria evitar problemas.

El brazo largo de Asier la rodeo, su mano estaba muy inquieta.

Un rayo estallo en la mente de Elia, las alarmas sonaron y de inmediato se volte6 hacia él, diciendo con vergiienza ;Qué estas haciendo?!”

“Tengo hambre “La voz baja y ronca de Asier estaba llena de vapor. Su voz era seductora y peligrosamente aterradora.

El corazon de Elia se contrajo, y retrocedié rapidamente: “Estoy cansada, quiero dormir, puedes dejar de molestarme?”

&

“Eso dependera de tu comportamiento Los ojos profundos de Asier la miraron con calma, emanando una poderosa intimidacién, como un leon en la selva esperando a su presa, elegante pero extremadamente peligroso

Las manos de Elia se aferraron a las sabanas, arrugandolas ligeramente. Sus cejas se arrugaron un poco mientras vigilaba al hombre frente a ella

Dijo que dependia de su comportamiento, ;como deberfa comportarse para satisfacerlo? ;Qué podia hacer para que la deje en paz?

Todo su control sobre ella ahora se debfa a su interes en su cuerpo

No la dejaria en paz hasta que se cansara de jugar con ella, jverdad?

Mientras Elia pensaba esto, record6 lo que Benjamin habia dicho antes.

Dijo que Asier habia mencionado la posibilidad de casarse con ella.

iPara darles un hogar completo a los nifios!

;Realmente esté considerando casarse con ella?

“Fuiste ti quien le pidi¢ al oficial Sergio que investigara y limpiara el nombre de mi madre, ;verdad?” De repente dijo Ella, no sabia como comportarse para satisfacerlo.

Solo podia cambiar de tema.

Asier no dijo nada, sus ojos oscuros aun la estudiaban.

Elia ya tenia la respuesta en su mente “Gracias. No sé si lo has considerado después de lo que dijo mi madre, nosotros dos podrfamos casaros

y formar una familia completa. Asi podria pasar todos los dias con los nifios, seria una buena eleccion.”

Elia dijo esto intencionalmente, queria saber lo que realmente pensaba.

Si realmente ha considerado casarse con ella.

Después de hablar, se detuvo y lo mir6 con ojos claros, sin parpadear.

Sus 0jos 0scuros se oscurecieron alin mas, se volvieron insondables, como un vortice gigante que podria succionar el alma de Elia.