¡Domestícame! Mi pequeña y gran Elia
Capítulo 652

Capitulo 652

Habia solo un paraguas, Vicente lo sostenia, Elia caminaba en el medio, Sergio se acercaba a ella, tenia que estar cerca para no mojarse con la

lluvia.

Cuando Elia caminaba a su lado, sus hombros se rozaron accidentalmente, Elia contuvo la respiracion y mir de recjo hacia el lado, encontrandose con los ojos oscuros y profundos de Acier su cuerpo se puto rigido, y su corazon latia irregularmante

Con timidez, retiré su mirada y no se atrevié a mirario de nuevo

"¢Qué viste?” Sergio, con su voz suave y calida resoné a su lado, en el aire humedo de la via finaleno de una tristeza humeda y pegajosa

Elia no se atrevi6 a mirario, mantuve su postura mirando hacia adelante y murmuré. “No vi nada "Sergio ven aqui tengo un paraguas extra, no es adecuado que tres personas se aprieten debajo de uno Benjamin se acerco, levo a Sergio

el y le dio un paraguas

Mientras hablaba Benjamin con su mirada aguda como la de un halcén, le lanzé una mirada severa a Elia

Esa mirada estaba definitivamente llena de hostilidad

Ela sinti6 un escalofrio en su corazon, entendié que Benjamin tenia un problema con ella g2

Ella no dijo nada y sigui6 a Vicente

Sergio recibié el paraguas de Benjamin con renuencia y observo con tristeza a Elia alejandose

La lluvia casa suavemente, cavendo sobre sus cejas gruesas, el agua de la lluvia se deslizaba por sus cejas, cala sobre sus largas pestafian, y finalmente cale en sus ojos, se deslizaba por sus parpados y caia, era dificil distinguir si era agua de lluvia o lagrimas.

Vicente llevé a Elia a su auto y abri6 la puerta. Elia estaba a punto de entrar

De repente una gran mano presiond la puerta del auto, cerrandola, bloqueando el camino para entrar al auto

Elu levanto la vista con sorpresa, vio la cara fria de Asier, contuvo la respiraciéon

“M: auto esta all, ve y sientate adentro La voz profunda de Asier reson6, no habia lugar para resistirse

Habua muchas personas en el funeral todas aun estaban en el estacionamento, con tantos ojos mirando, Elia no queria sent

“Tengo que volver a trabajar me ire en el auto del Sr. Fuentes, es mas conveniente “Dijo Ela

La mirada profunda de Asier se posé en Vicente

Vicente rdpidamente dijo. “Ya es la hora de salida, puedes volver a casa. Ela, tengo cosas que hacer, no puedo llevarte.

de Asier

Despues de decir esto. Vicente se sentd en el asiento del conductor, arrancé el motor y se fue répidamente.

Ela

Sr Fuentes, eres un maldito despreciable, asi es como tratas a tus empleados?

Ela vio el auto de Vicente alejandose, y cuando volvio en si se encontro con la mirada profunda de Asier

una sensacion de opresion total

h20 respira con dificultad y ya no tenia razones para negarse asi

Se sento

aulc

ier tambien se subio se sento a su lado,

Elip de movi¢ Tach lado instantivamente para evitar

demasiad

murada profunda de Aser se proyectaba sobre ella ji a continuac

I dirigié hacia el au

aun mas estreedia

El corazén de

peligro

Temo que no

* En mi Habero

ente erspac a ti tha is explop con debilidad

kami pregundo (

Una frase que era basta

da pero cuando sabo de su boca tena uta etatudacio

¢iu queria rerse en au riderot peru tes prieku

"No es que mi trasero es gracide ocupa mucho espacio tha se do e conta comedatamente, para que disa persara que estaka svitandin

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