¡Domestícame! Mi pequeña y gran Elia -
Capítulo 450
1
Capitulo 450
Ele entendié de inmediato a lo que se referia Jimena con las fresas, su rostro se puso rojo al instante, liberando a Jimena
ins, que habla corrido hacia ellas, se subi6 al sofa y se sent6 entre Elia y Jimena. Con sus grandes ojos brillantes mir6 a Jimena y luego a Elis, con una adorable sonrisa, pregunté con anhelo “Jimena, mama, ;de qué fresas hablan?, ;dénde estan las fresas?, yo también quiero comer.”
La pequefia, inocente, alin no entendia nada.
Jimena se mordié los labios para ocultar su risa
Elia se sinti6 tan avergonzada que deseaba meterse en un agujero en la tierra, intentd disimular su vergtienza y le dijo suavemente a Iria: “Las fresas todavia estan en el supermercado, no las hemos comprado, Jimena solo decia que iria al supermercado a comprar fresas para ti.”
Es cierto, Jimena? Iria gir6 la cabeza, sus ojos brillantes miraban a Jimena
Jimena asintié con una sonrisa: “Si, si vamos, Jimena te llevara a comprar fresas”
Cuando se levanté para ir a la puerta con Ina, le lanzé a Elia una mirada juguetona y sugerente Elia se sinti6 incomoda y avergonzada g2
Los nifios no entendieron de que estaban hablando, pero Rosalinda si Mir¢ a Elia con una mezcla de reprobacién y resignacion antes de entrar en la cocina
“Mama, a donde fuiste anoche, no te vimos cuando nos levantamos esta mafana Joel agitando sus pequefias piernas, se acerco a ella, sus ojos infantiles la miraban preocupados
Elia le acaricio suavemente su pequefia y suave cara, su voz era suave “Mama tuvo que trabajar horas extras, carino”
"Odio las horas extras, cuando crezca, voy a derrotarlas “Joel fruncié el cefio, odiaba que las horas extras se llevaran a su madre.
Elia no pudo evitar sonreir al ver su adorable inocencia
“;Qué es esto?” Abel con su pequefia mochila a la espalda, estaba de pie frente a una pequefa mesa, mirando un collar que estaba sobre ella, miraba fijamente el chip dentro del dije de
hube
Abel, el mayor, siempre habia estado interesado en estos dispositivos electronicos.
Incluso un chip pequefo no podia escapar de su vista
Elia volvié en si y vio que Abel estaba mirando el chip.
Rapidamente recogi¢ el collar, cerré el dije de nube, y armé un collar completo e intacto.
Le sonrié a Abel y dijo “Este es el collar de mama, es de alta tecnologia, te gusta?”
La cara de Abel, que se parecia mucho a Asier, se oscurecié un poco antes de asentir “Es bonito.” “Gracias, carifio, a mi también me parece bonito Dijo Elia, volviendo a ponerse el collar
Aunque habia descubierto este secreto, tenia que actuar como si no supiera nada, como si todo fuera normal.
Asi no levantara sospechas
Ela, llena de amor maternal, se acomodo6 en el sofa con sus tres pequefios, los besé y jugé con ellos. La noche anterior no habia estado con ellos, y se sentia un poco culpable. Queria compensar el tiempo perdido.
Durante la cena, Elia les dijo a los nifios que tendria que irse de viaje por unos dias, y que durante ese tiempo, Jimena vendria a visitarlos con frecuencia
Jimena ayudo a Elia a encubrir su viaje y confirmé que Elia se iria
Rosalinda no sospecho nada
Aunque los nifios estaban decepcionados, entendieron que no podian interferir con el trabajo de su madre
Elia queria quedarse con los nifios, estar con ellos
Pero tenia que separarse de ellos
Asier estaba vigilando sus movimientos en todo momento.
Si se daba cuenta de que ella se quedaba en “casa de su amiga” todo el tiempo, podria atacar en cualquier momento, y descubrir que los cuatro nifios la llaman mama. Esa noche, Ela acurruco a los nifos hasta que se durmieron
Iria, con su barriguita redonda subiendo y bajando con cada respiracién, tenia una cara adorablemente regordeta Era increiblemente linda
.
If you find any errors (non-standard content, ads redirect, broken links, etc..), Please let us know so we can fix it as soon as possible.
Report