¡Domestícame! Mi pequeña y gran Elia
Capítulo 1399

Capitulo 1399

En la cama del hospital, yacia Asier, a quien Elia no habfa visto en varios dias. A pesar de que solo habian pasado cinco dias, para Elia parecia una eternidad.

Conforme se acercaba, la figura de Asier se iba delineando ante sus ojos.

Asier estaba tendido en la cama, vestido con una bata de hospital azul, cubierto por una sadbana delgada, que dejaba entrever su figura alta y esbelta.

Al lado de la cama habfa un monitor de signos vitales, cuyas lineas dibujaban el ritmo constante de la vida que atin habitaba en él.

Tenia la cabeza vendada con gasas blancas, manchadas con un liquido marrén que indicaba la extension de la herida en su craneo.

El hombre que solfa ser frio y distante, ahora yacia tranquilamente en la cama, su rostro afilado habfa perdido su frialdad habitual, inspirando una tranquila angustia.

Sus cejas densas estaban serenas, sin el menor atisbo de turbulencia, sus ojos cerrados, y sus largas pestafas cubrian los parpados, ocultando la mirada penetrante.g2

Su nariz, ain prominente, ya no tenia el filo de antafo, y sus labios delgados estaban naturalmente cerrados, ligeramente pélidos, lejos de su habitual dominio y pasion.

El hombre que antes era imponente y distante, ahora parecia tan fragil que se temfa pudiera desvanecerse en cualquier

momento.

Elia sinti6 un nudo en la garganta al ver a Asier tan debilitado, sus ojos se calentaron, las lagrimas brotaron y su respiracién temblaba: “Asier, lo siento...”

Su voz temblaba, incluso mientras intentaba controlar sus emociones, los sollozos se derramaban. No habfa palabras que pudieran servir, aparte de esas, para expresar su corazon lleno de culpa.

Si Asier no hubiera intentado salvarla, jamas habrfa acabado asf.

Hasta cierto punto, Benjamin tenia razon, su presencia habia causado el estado actual de Asier.

Si Asier nunca la hubiera encontrado, seguiria dominando en el mundo de los negocios, siendo un magnate

inalcanzable.

No sabrfa de la existencia de sus cuatro hijos, se habria casado con Betiana Abreu bajo los arreglos de Benjamin, tendrian hijos y vivirian una vida familiar feliz y plena.

Envejeceria rodeado de hijos y nietos.

En lugar de eso, estaba alli, sin saber si llegarfa a viejo.

AUn tan joven y con una salud envidiable, yacia en la unidad de cuidados intensivos.

Elia sentfa dolor, culpa, remordimiento y panico.

Temfa que Asier siguiera durmiendo asf para siempre.

“Elia, no te aflijas tanto, debemos pensar en un plan para cuidar de Asier. Lamentarse no ayuda, solo acciones efectivas pueden cambiar la situacion”, la consolé Maximiliano, quien estaba a su lado escuchando sus sollozos

contenidos.

El también habia notado el estado de Asier, el hombre que antes era imponente y astuto, ahora parecfa un muerto en vida, y eso también le dolfa.

Maximiliano y Asier tenfan una amistad profunda, habian colaborado en negocios en el extranjero y habfan adquirido empresas juntos.

Cada vez que trabajaba con Asier, Maximiliano se sentia complacido por su increiblemente aguda mente para los

1/2

Capitulo 1399

negocios, que le forzaba a rendirse ante su habilidad.

No solo admiraba a Asier, sino que sentfa una camaraderfa especial.

"iPuedo quedarme a solas con él un rato?*, pidi¢ Elia, girando su rostro bafiado en lagrimas cristalinas.