Capitulo 1389

“Fui yo quien lo tomo.” Detrés de ella, una voz de hombre resoné.

Elia giro bruscamente y vio a Maximiliano de imponente estatura de pie detras de ella. Maximiliano era un hombre guapo, con un aire de distincién e inteligencia. Canas adomaban las sienes de su cabello, y aunque su rostro mostraba arrugas, no podian ocultar la gracia juvenil que ain posefa. Sus ojos aristocraticos miraban a Elia con un destello de ternura.

Al verto, Elia se quedd un momento sin palabras, bajé la mirada y entonces vio el informe médico que Maximiliano sostenia en sus manos.

Elia alin no sabia cual era el resultado.

Pero Maximiliano ya lo habia visto.

¢Entonces, cual era el resultado?

;Era realmente hija de Maximiliano?

Aunque no le importaba de quién fuera hija, en ese instante, deseaba fervientemente que el resultado confirmara una relacién de padre e hija con un noventa y nueve por ciento de certeza.g2 Porque de esa forma, tendria la oportunidad de cuidar a Asier.

De lo contrario, su deseo de cuidar a Asier serfa tan dificil como escalar el cielo.

Las manos de Elia, colgando a los costados de su cuerpo, se apretaron inconscientemente, y comenzo a sentirse inquieta y nerviosa.

Al ver que ella fijaba su mirada en el informe que él tenfa, Maximiliano sonri6 ante la preocupacién en su rostro: “Por fin veo que te importa nuestra relacién.”

Ella, el dia anterior, habia mostrado una expresion de indiferencia que realmente le habia herido. Elia levanto la vista, sin &nimo para bromas, y dijo con seriedad: “;Cudl es el resultado?”

“Mafana, vendras conmigo a la Capital, te llevaré a conocer a la familia Griera,” dijo Maximiliano sin responder directamente a su pregunta, y después de esas palabras, se dio media vuelta y se marcho.

Elia observo su figura alejandose sin decir nada

Sin embargo, su corazén estaba lleno de sentimientos encontrados.

Maximiliano querfa que ella lo acompanara mariana a la Capital, a la familia Griera. ;Significaba eso que estaba dispuesto a cumplir su peticion?

;Era realmente hija de Maximiliano?

Aunque no habia visto el resultado, la actitud de Maximiliano lo decfa todo.

Este Maximiliano era realmente un hombre extrafio; si ya habia decidido venir hoy por el resultado, ;por qué no lo mencioné ayer?

Ademas, le habia dado su nimero de teléfono, ;no era eso redundante?

Pero, al final, lo importante era que Maximiliano estaba dispuesto a llevarla a la familia Griera para hablar con Benjamin y permitirle cuidar a Asier. Con eso bastaba.

El resto, no querfa pensar demasiado, ni indagar.

Elia compro un nuevo conjunto de ropa para ponérselo, ya que su casa se habfa derrumbado por completo, y todo dentro de ella estaba enterrado bajo los escombros, seguramente inservible.

En estos dias, habia estado vistiendo la bata de hospital, pero manana irfa con Maximiliano a la casa de la familia Griera, y naturalmente no podia ir demasiado casual.

Después de comprarse varios conjuntos de ropa, también le compré algunos a Josefina.

21:31

Capitulo 1389

Elia encargé al sefior que habia traido a Josefina al hospital que cuidara de ella y le ofrecié dinero. El sefior estaba dispuesto a cuidar de Josefina, pero se negaba a aceptar el dinero de Elia.

No pudiendo convencerlo, Elia se vio obligada a darle el dinero a Josefina para que ella encontrara la manera de darselo.

Una vez que dejo todo arreglado con tia Josefina, Elia partié con Maximiliano.

El camino de Pueblo Saurf a la Capital lo habfa recorrido incontables veces.

Pero esta vez, parecfa extraordinariamente largo y lleno de ansiedad.

Aunque Maximiliano la acompanaba, Elia no estaba segura si Benjamin accederfa a la solicitud de Maximiliano y permitirle cuidar a Asier.

Mientras Elia se perdia en sus pensamientos, el carro se detuvo en el estacionamiento de la Casa Griera. Maximiliano salié primero del carro, pero en lugar de entrar directamente, caminé hacia el asiento trasero y, con un gesto de caballero, abrié la puerta del carro esperando que Elia bajara. “Llegamos, vamos a entrar juntos.” Maximiliano dijo con una sonrisa en los labios.

Elia se quedd un poco sorprendida; no estaba acostumbrada a tanta efusividad por parte de Maximiliano.

A pesar de eso, hizo caso y sali6 del carro. Maximiliano, con tacto, no intenté tomar su mano ni le pidi6 que se enganchara de su brazo, sino que caminé a su lado, hombro con hombro. “Maximiliano, qué bueno que viniste.” En ese momento, Benjamin sali6 de la casa para recibirlos. Tenfa una expresion de cortesfa en el rostro, pero en cuanto su mirada se posé en Elia, que estaba al lado de Maximiliano, su semblante se torn sombrio de inmediato.

Tip: You can use left, right keyboard keys to browse between chapters.Tap the middle of the screen to reveal Reading Options.

If you find any errors (non-standard content, ads redirect, broken links, etc..), Please let us know so we can fix it as soon as possible.

Report