Capitulo 1269

No le harfa nada, porque Asier le daba importancia al bebé que ella llevaba en su vientre, sabia que en esos momentos no se podian hacer ciertas cosas

Ella tenia que ser astuta, seguir quitadndole los pelos del cuerpo sin enfurecerlo, porque si lo hacia, él podria llegar a ignorar incluso la existencia del nifio en su vientre.

"Voy a traerte agua para beber.” Elia, sintiendo un escalofrio por la mirada gélida y afilada de Asier, desvio la vista y se apresur6 a ir hacia la jarra, donde habfa un vaso con agua que no habia sido tocado.

Elia estaba a punto de tomar ese vaso para darselo a Asier.

Pero extendié la mano, se detuvo un segundo y, en cambio, tomé otro vaso vacio para servir agua fresca.

Ese vaso lo habfa llenado antes, pensando en darselo a Ramiro, pero no habia tenido oportunidad de hacerlo porque Asier habia llegado.

Asier despreciaba incluso las sdbanas donde Ramiro se habia sentado, asi que si ella le daba el vaso que habia preparado para Ramiro, lo mas seguro que se enfurecerfa.

Mejor no tentar la suerte, penso, no valia la pena probar los limites de su ira.

Elia sirvié un vaso nuevo de agua y se acercé a Asier, extendiéndoselo: “Toma, bebe un poco de agua para saciar la sed."g2

Asier, con una mirada sombrfa, observo el vaso en sus manos y luego a ella: “;Y ti no tienes sed?” ;Ella no iba a beber?

"Ya bebi hace un rato.” Dijo Elia, curvando sus cejas en una sonrisa, y afadié bromeando: “Tu saliva. Era una broma para burlarse de él.

Pero cuando sonrié con malicia y entrecerré los ojos, sus cejas arqueadas y sus ojos brillantes eran encantadores, como los destellos del sol matutino, confortables y calidos, que penetraban en el corazon.

La mirada de Asier se agit, su interior se perturbo y, con el indice, levanté la barbilla de Elia, observandola con intensidad: “; Quieres beber un poco mas?”

Elia reconocio la intensidad en sus ojos, una mirada que conocfa mejor q

que nadie.

Sinti6 miedo y rdpidamente se apart6 de su mano, dando un paso atréas: “No, gracias, no tengo sed. Mejor bebe ti.”

Diciendo esto, extendié de nuevo el vaso hacia él.

Su corazén latia desordenadamente.

Habfa sido ingenua al pensar que, porque su humor parecia haber mejorado, podia bromear con él. El era un tigre de verdad, capaz de devorar a alguien.

Asier la observé profundamente y tomo el vaso que ella le ofrecia, bebiendo todo su contenido. Elia, de pie frente a él, observaba como bebia; su cuello era largo y atractivo, y emanaba una masculinidad magnética.

15:07

Capitulo 1269

A medida que tragaba, su nuez de Adan subfa y bajaba, una vision que destilaba una intensa presencial hormonal.

Ella qued6 embobada mirandolo.

Cuando se distrajo, Asier le pasé el vaso vacio.

Elia no reaccioné de inmediato, hasta que sintié su mirada insistente y dudosa, entonces se sobresalté y rapidamente tomé el vaso vacio de sus manos, colocandolo de vuelta en su sitio.

Sin palabras y con un aire de incomodidad, Elia estaba a punto de sentarse en la cama.

Pero antes de que su trasero tocara las sdbanas, una mano grande la agarré por el codo y la levanto.

Sorprendida, Elia mir6 a Asier y dijo: “Solo iba a sentarme un momento.”

Asier desvi6 la mirada hacia la mesita de noche, empujando el teléfono a un lado y se senté en ella, atrayéndola hacia su regazo.

Elia, exitosamente, terminé sentada sobre sus piernas.

Sus muslos eran fuertes y llenos de poder, pero también emanaban un calor ardiente.

Apenas Elia se senté sobre él, su corazon se aceler6 con la sensacion de fuerza y el calor abrasador. Intenté huir por instinto, pero Asier la atrapé de nuevo, con una voz baja y ronca: “No te apresures, esperemos que cambien las sabanas.”

Tip: You can use left, right keyboard keys to browse between chapters.Tap the middle of the screen to reveal Reading Options.

If you find any errors (non-standard content, ads redirect, broken links, etc..), Please let us know so we can fix it as soon as possible.

Report